17-06-2016

Los profesionales y estudiantes de Ingeniería informática, respaldadas por los distintos colegios y asociaciones del sector reclamamos al gobierno que se resuelva la situación regulatoria de la profesión para pedir el reconocimiento de la cualificación profesional de la Ingeniería informática. 

El último informe emitido por el Ministerio de Industria, Energía y Turismo sobre la modificación del Real Decreto 1837/2008 sobre Reconocimiento de Cualificaciones Profesionales y que excluye al sector de la ingeniería informática ha provocado la indignación de profesionales, estudiantes y colectivos de este sector. Nuevamente no se equipara en cualificaciones profesionales a la ingeniería informática con el resto de ingenierías. 
Este fallo regulatorio y burocrático perjudica gravemente a los informáticos tanto en nuestro país, así como la posibilidad de competir a nivel europeo por no tener el reconocimiento académico y profesional propio de una ingeniería; ya que consideramos que éstas no pueden carecer de atribuciones profesionales fijadas.

El comunicado de RITSI (reunión de estudiantes de ingenierías técnicas y superiores en informática) muestra muy claramente la situación actual y el problema derivado de la misma: Comunicado #InformaticaSolucionYa. 

En palabras de Juan Pablo Peñarrubia, presidente del Consejo General de Colegios Profesionales de Ingeniería Informática (CCII):

"Por el hecho de no tener una cualificación profesional reconocida, los estudiantes tienen condiciones diferentes para acceder a becas, les afecta también a las tasas que tienen que pagar y, en definitiva a su futuro laboral. A los profesionales que ya ejercen, les afecta en los sueldos que perciben, mucho menores, y en su capacidad de competir de igual a igual por un puesto de trabajo tanto en España como en Europa. No podemos aceptar que esto siga así"

Nos sumamos por tanto a las campañas de que han lanzado los distintos colegios profesionales, así como asociaciones de estudiantes como la Asociación burgalesa de ingenieros informáticos donde tratan de poner de manifiesto un problema que se remonta a 2008 y aún no ha sido solucionado por ningún gobierno desde entonces por una cuestión de dejadez política.